Este leopardo hambriento resultó ser incapaz de enfrentarse a un erizo espinoso que intentaba —y no lograba— derribar.
En una rara observación en el Parque Nacional Kruger en el noreste de Sudáfrica, se puede ver al gran felino rodeando a la criatura espinosa.
Pero el erizo se niega a bajar la guardia y usa sus púas para evitar que el leopardo se acerque demasiado.

Este leopardo hambriento resultó ser incapaz de enfrentarse a un puercoespín espinoso que intentaba —y no lograba— derribar.
Un leopardo puede correr a velocidades de hasta 40 mph y generalmente depende de su mordida Ьгᴜtаɩ al atacar a sus presas. Sin embargo, para esta pelea, el felino tuvo que utilizar diferentes tácticas mientras intentaba alcanzar las partes más suaves del puercoespín.

En una rara observación en el Parque Nacional Kruger, en el noreste de Sudáfrica, se puede ver al gran felino rodeando a la criatura espinosa.

Pero el puercoespín se niega a bajar la guardia y usa sus púas para evitar que el leopardo se acerque demasiado.
El clip de dos minutos muestra a un leopardo tenaz trabajando cada ángulo para acercarse lo suficiente al puercoespín y encontrar un punto débil.
Pero el animal espinoso usa sus púas para evitar que el hambriento leopardo invada su espacio en cada intento.
Eventualmente, el felino se rinde y encuentra un lugar a una distancia segura del victorioso roedor.
Ard van de Wetering capturó esta escena en un viaje reciente al parque y decidió filmar el encuentro.

El clip de dos minutos muestra a un leopardo tenaz trabajando cada ángulo para acercarse lo suficiente al puercoespín y encontrar un punto débil.

Eventualmente, el felino se rinde y encuentra un lugar a una distancia segura del victorioso roedor.